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miércoles, 1 de abril de 2015

DE REPOSO

Considerando la  agitación política que nos rodea,quizá  este periodo semivacacional sea el mejor  para que, con calma, consideremos qué nos va a aportar culturalmente la nueva política que se presagia.
Ojala los nuevos dirigentes consideren la educación y la cultura como parte integrante de la sociedad y no sólo como un apéndice de sus intereses publicitarios u económicos, como ha sucedido hasta ahora..
Esperemos también que se reparta equitativamente  en cada territorio y no dependa de la habilidad e interés de cada individuo de un partido o de un gobierno,pues en Aragón tenemos tanto derecho a disfrutar de la cultura como el resto de comunidades.
En este sentido nuestros futuros dirigentes ,en mi opinión, deberían responder a varias cuestiones con la intención de equilibrar nuestra deuda cultural :

  • Cómo van a defender y apoyar nuestro patrimonio cultural (historia,arquitectura,tradiciones,nuestras lenguas autónomas...).Qué solución van a aportar a nuestras ruinas, como las  del Teatro Fleta.Cómo va a proteger y mejoras nuestra naturaleza y patrimonio arquitectónico en nuestras ciudades y medio rural . Van a dejar morir poco a poco al aragonés o lo van a rematar con otra de sus leyes?
  • Van a equipararnos con los demás con una oferta cultural propia?Vamos a tener una Orquesta institucional,un coro institucional,una ópera ,un ballet,se va a premiar y potenciar la creación y la investigación en las artes y en la ciencia?Se les va a dar opción a nuestros jóvenes de trabajar aquí en estas disciplinas sin necesidad de emigrar a otras comunidades?
  • Se va a proteger y blindar la educación para que no se cometan las aberraciones de los últimos cuatro años,se va a promover y declarar por fin una educación laica e igualitaria? 
  • Se va a promover una ley de mecenazgo que pueda favorecer la educación ,la cultura y la investigación como una de las vías para evitar el fraude fiscal?
  • Etc..
La cultura apenas aparece en los programas políticos por no considerar a los votantes como entes culturales y hay que rebelarse contra este prejuicio porque como tales nos sabemos necesitamos de una apropiada  y dinámica vía cultural  así como de una  educación progresista.Quizá de esta manera,sin obsesionarse por el inmediato rendimiento económico de cada una de las decisiones,se podría por ejemplo mitigar el efecto de uno de los grandes problemas de nuestra sociedad : el desempleo. Y este sólo es un pequeño ejemplo de cómo utilizar la  cultura y la educación como fuentes inseparables de riqueza y dignidad.

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